1786

Fue aprobada y aceptada la propuesta que, con el apoyo del Rey Carlos III, el Obispo de Guadalajara, Fray Antonio Alcalde y Barriga, hiciera al Capitán General o Gobernador, Don Eusebio Sánchez Pareja, para la edificación de un Hospital a las afueras de la ciudad. El proyecto contemplaba la construcción de una Iglesia, un departamento para religiosas y un camposanto. El Ayuntamiento cedió gratuitamente el terreno de 760 varas de largo y 580 de ancho.