Los antimicrobianos son un grupo de fármacos que son utilizados para combatir las infecciones, los cuales se dividen con base al mecanismo de acción: antibacterianos, antivirales, antifúngicos, antiparasitarios. Estos pueden administrarse de tres formas: intravenosos, vía oral o intramuscular.
El Dr. Dr. Rodrigo Escobedo, Jefe del Servicio de Infectología Adultos del AHCGFAA comentó: “Los microorganismos al exponerse por primera vez a los antimicrobianos son destruidos, pero deben usarse en cierta duración y en dosis adecuadas, de lo contrario es ahí cuando la resistencia se genera.”
Cuando los antimicrobianos son usados sin prescripción médica adecuada, necesidad o en varias ocasiones para el mismo proceso, se generan mecanismos de resistencia que hacen que el antibiótico ya no funcione y la infección avance hasta crear un choque séptico que puede generar la muerte del paciente.
Se estima que en el 2050 más de 10 millones de personas podrían morir cada año debido a una infección causada por microorganismos resistentes a los tratamientos, lo que significa 2 millones de personas más que por cáncer.
Los antimicrobianos han sido el descubrimiento clave para disminuir la mortalidad por infecciones en las últimas décadas. Sin embargo, su mal uso y abuso baja la efectividad.
La Semana Mundial de Concientización sobre Resistencia Antimicrobiana, que comprende del 18 al 24 de noviembre. Se instituye como un llamado urgente a hacer el uso responsable de los antibióticos y promover mejores prácticas en el sector salud y la población.
La recomendación del Dr. Rodrigo Escobedo para evitar la resistencia a los antimicrobianos es seguir estos pasos: Lavado de manos, valoración médica para saber cuándo usar los antimicrobianos, tomar esquemas cortos de antibióticos.